Después de una dramática victoria de 2-1 sobre Sassuolo, el jugador de Inter Milan Carlos Augusto elogió la actuación de su equipo en San Siro. Subrayó la importancia de esta victoria después de dos derrotas consecutivas contra Udinese y Juventus, y señaló que el equipo mostraba resiliencia contra un determinado oponente. Augusto destacó el espíritu de equipo y la experiencia de los jugadores, afirmando que el éxito es agradable pero que el equipo sigue centrado en la continuación de la temporada y mejora continua. También expresó su satisfacción personal, no sólo por el resultado, sino también por el regreso a la forma de Dimarco y el esfuerzo colectivo.
El arbitraje de Livio Marinelli en este partido fue ampliamente elogiado, especialmente por su gestión de los tres objetivos y por la negativa de un objetivo por Davide Frattesi. Aunque fue criticado por no sancionar a Carlos Augusto por un gesto violento contra Berardi, Marinelli tomó decisiones clave que influyeron en el curso del juego. Esta actuación fue particularmente importante para Inter, que trató de rebotar después de difíciles contratiempos. El árbitro mantuvo la línea durante todo el juego, incluso ante incidentes menores, mostrando una consistencia significativa.
La victoria de Inter Milan revivió el debate sobre el futuro del estadio de la ciudad, con el alcalde de Milán, Beppe Sala, respondiendo a las advertencias de Beppe Marotta sobre un posible movimiento del equipo. Sala dijo que el Ayuntamiento debe tomar su decisión independientemente, teniendo en cuenta el contrato actual y el futuro de Milán. Rechazó la idea de que los equipos abandonen la ciudad como una amenaza, destacando la necesidad de una evaluación exhaustiva de las cuestiones y contratos en curso. La situación sigue siendo compleja, pero el Consejo debe tomar una decisión informada para el futuro deportivo y económico de la ciudad.