La Olympique de Marsella ganó una victoria convincente de 4-0 sobre Lorient, un alivio para el club después de que comience la temporada difícil. El equipo ha demostrado un notable control y eficiencia, sobre todo mediante la expulsión de un jugador opositor y la explotación de su superioridad numérica. Nuevos reclutas, como Mason Greenwood, Angel Gomes y Nayef Aguerda, marcaron objetivos, demostrando el potencial ofensivo del equipo. Esta victoria, la quinta en casa consecutiva en Ligue 1, fortalece la confianza antes de una semana crucial con importantes partidos en la Champions League contra el Real Madrid y en el campeonato contra PSG.

Sin embargo, esta victoria está teñida con preocupación por el estado de salud de Amine Gouiri, que tuvo que salir del campo después de un shock en su cara. Los exámenes excluyeron una lesión grave de la mandíbula, que fue una excelente noticia para el entrenador Roberto De Zerbi, que temía una ausencia prolongada. Gouiri permanece bajo supervisión médica para el dolor leve del hombro, pero su ausencia prolongada sería un duro golpe para el ataque de Marsella, que se basa en su perfil versátil y su capacidad para crear espacios.

Al mismo tiempo, el Real Madrid tiene un duro éxito con la ausencia de su defensor central Antonio Rüdiger para el partido Champions League. Esta lesión muscular en la pierna izquierda, estimada en tres meses de descanso, requiere que Xabi Alonso revise sus planes defensivos. La ausencia de Rüdiger podría abrir una oportunidad para Godfrey Kondo, que llevó el brazalete en el partido contra Lorient y que parece haber restablecido la confianza del entrenador. Su calma, su experiencia y su perfil físico podrían impulsarlo al soporte, ya que OM enfrentaba a los principales oponentes.