Rafael van der Vaart, en previsión del partido crucial entre PSV y Ajax, expresa su sorpresa por el uso actual de algunos jugadores caros en los dos clubes holandeses. Señala que importantes inversiones, como las realizadas por Ajax en Oskar Gloukh y Raúl Moro, o por PSV en Paul Wanner y Dennis Man, no resultan en un lugar regular en los equipos de base. Van der Vaart dijo que estaba desconcertado por esta situación, ya que sentía que un jugador contratado a un alto costo debería lógicamente tener la oportunidad de comenzar los primeros partidos y que la falta de confianza podría ser perjudicial para su desarrollo.
El analista destaca un problema de gestión laboral en Ajax, ilustrado por el caso de jugadores como Wout Weghorst, cuya falta de tenencia después de un buen partido podría desalentar a otros. Critica la idea de adquirir jugadores caros y luego relegarlos al banquillo, argumentando que esto crea una situación absurda y socava la motivación de los recién llegados. Van der Vaart destaca la importancia de dar a los nuevos jugadores la confianza que necesitan para prosperar y mostrar su valor.
Peter Bosz, un entrenador de PSV, trata de justificar la falta de juego de algunos jugadores evocando lesiones, períodos de adaptación a un nuevo entorno, y el tiempo que tarda en integrarse plenamente en el equipo. Se cita ejemplos como Ivan Perisic y Tillman, que también necesitaba tiempo para adaptarse. Sin embargo, Van der Vaart impugna este enfoque, diciendo que los nuevos jugadores deben tener la oportunidad de demostrar su valor y que un período de adaptación no debe dar lugar a una falta de tiempo de juego.