La Olympique de Marsella sufrió una derrota de 2-1 contra el Real Madrid en su primer partido de la Champions League, resultado marcado por una controversia sobre arbitraje. Los dos objetivos de Vinícius Júnior se lograron después de las sanciones en el Real Madrid, el segundo de las cuales fue particularmente indignado. Dimitri Payet, ex capitán de la OM, criticó enérgicamente el laudo arbitral, considerando que el árbitro intentó compensar una expulsión anterior y que había consultado excesivamente al VAR. Esta situación ha despertado los temores continuos dentro del fútbol acerca de la tendencia de los árbitros a tratar de reequilibrar una reunión después de decisiones importantes.

La derrota de OM, a pesar de su actuación alentadora, fue vista como un alto en su viaje europeo. Los jugadores de Marsella expresaron su frustración con este escenario, destacando que el equipo había mostrado hermosas secuencias de juego, especialmente con el objetivo de Mason Greenwood. Roberto De Zerbi, entrenador de OM, también planteó preguntas sobre arbitraje, aunque menos categóricamente que su ex jugador. Esta controversia alimentó un intenso debate sobre la justicia del laudo arbitral, dejando un sabor amargo para los aficionados y jugadores de Marsella.

La prensa española cubrió ampliamente el juego, destacando el rendimiento de OM y la fuerza del colectivo Marsella. Observadores como Gutí y Anton Meana reconocieron la calidad del juego Olympian, destacando la superioridad del Real Madrid, en particular gracias al decisivo desempeño de Kylian Mbappé, autor de dos sanciones transformadas. La prensa destaca el ambicioso proyecto de OM, con un equipo en construcción y jugadores capaces de competir con los principales clubes europeos. A pesar de la derrota, este viaje a Madrid es visto como una fuente de experiencia y un fuerte mensaje enviado a Europa para la continuación de la Champions League.